Una unidad de infantería alemana no siempre dispone de armas antitanques o vehículos cazacarros, así que la soldados tuvieron que desarrollar tácticas y métodos para enfrentarse a los monstruos de acero que se les venían encima. Veamos con nuestro Sargento Esaú en las próximas entradas un poco más de cómo trabajaban los grupos denominados "cazadores de tanques" y quizás aprendamos algo para cuando se les venga encima unas cuantas toneladas de diplomacia alemana. Atentos...
En todas las ramas del ejército alemán, se eligen soldados destacados para servir como miembros de los escuadrones de cazadores de tanques. Estos escuadrones, cada uno de los cuales consta de un líder y al menos tres hombres, reciben un entrenamiento especial. Al igual que los ingenieros de combate, están continuamente listos para el combate cuerpo a cuerpo con tanques y otros vehículos blindados. (Para simplificar, este artículo mencionará sólo los tanques.) Cuando surge una necesidad, los escuadrones se combinan en grupos de cazadores de tanques. En general, los alemanes utilizan cazadores de tanques si no hay armas perforantes a la mano, o si el fuego de estas armas no es efectivo contra las fuerzas de los tanques enemigos.
El equipo para la caza cercana de tanques consiste en botellas incendiarias, minas Teller, TNT, armas automáticas (tanto alemanas como capturadas), subfusiles, pistolas de bengalas tipo Very, granadas de mano, granadas de humo y velas, lanzallamas, palancas, hachas y material de camuflaje.
Es un principio alemán que los tanques enemigos y la infantería deben ser separados para que puedan ser destruidos más fácilmente. Si se dispone de armas perforantes, su fuego se dirige contra los tanques que se aproximan, mientras que las armas restantes se utilizan principalmente contra la infantería que acompaña a los tanques. La infantería que viaja en tanques es destruida antes de que los cazadores de tanques intenten asaltar los vehículos. Si los tanques llegan sin infantería, el fuego de todas las armas disponibles se concentra contra las partes vulnerables del tanque, para crear condiciones favorables para el asalto cuerpo a cuerpo. Si este apoyo de fuego con otras armas es imposible, los escuadrones de cazadores de tanques proceden sin él.
Pistola Molins tipo Very para lanzar bengalas |
La realización del combate cuerpo a cuerpo depende en gran medida de la situación inmediata. El número, tipos y tácticas de los tanques atacantes, el terreno, la posición de los alemanes y el efecto del fuego defensivo alemán siempre varían, y los cazadores de tanques intentan cumplir esta variación mostrando adaptabilidad y maniobrabilidad. Una brigada de cazadores de tanques ataca sólo a un tanque a la vez. Si varios tanques atacan juntos, y si sólo hay una brigada de cazadores de tanques, la brigada ataca a ese tanque que parece ser el más peligroso en ese momento, o que promete el éxito más rápido si es atacado. Si hay suficientes escuadrones disponibles, los alemanes hacen un esfuerzo -especialmente en defensa- para mantener uno o más escuadrones listos, en la retaguardia, para asaltar los tanques que se abren paso.
El procedimiento general para los cazadores de tanques es: primero, cegar el tanque, luego detenerlo y finalmente destruir el vehículo y su tripulación en combate cuerpo a cuerpo.
El que los cazadores de tanques avancen al comienzo de un ataque de tanques, el que permanezcan en sus trincheras hasta justo antes del ataque, o el que lleven a cabo todo el asalto de manera encubierta depende enteramente de la situación. Las trincheras son estrechas y no tienen parapetos, lo que dificulta su identificación. Están bien camuflados con matorrales de la zona y, siempre que es posible, están rodeados por un cinturón de minas Teller. (En los combates en los pueblos, las esquinas de las casas, e incluso los arbustos y las cercas, sirven como escondites desde los que los cazadores de tanques atacan de cerca). Obstáculos de todo tipo, minas y armas falsas, y carteles que dicen "¡Atención, Minas!” Se utilizan para conducir tanques enemigos a terrenos desfavorables para ellos, pero tácticamente ventajosos para los escuadrones de asalto y las armas antitanque.
Las tácticas empleadas por los cazadores de tanques, por supuesto, dependen en gran medida de si los tanques están en movimiento o se han detenido voluntaria o involuntariamente.
Cuando se preparan para atacar un tanque en movimiento, los cazadores de tanques, que permanecen bien ocultos, permiten que el tanque se acerque a ellos (de 20 a 7 yardas). Luego, cegando el tanque, intentan detenerlo o al menos ralentizarlo. Mediante el uso de cargas explosivas, la brigada de caza tanques hace un esfuerzo por destruir las orugas del tanque y paralizarlo. El paso final es asaltar el tanque y destruirlo y a su tripulación. (Las armas de combate cuerpo a cuerpo y cómo las usan los alemanes en el procedimiento de "Cortar, detener y destruir" se tratan en el párrafo 2 de esta sección). En el caso de un tanque detenido, el escuadrón se acerca a él, aprovechando el terreno de la mejor manera posible.
Alrededor de cada tanque hay un "espacio muerto" que no puede cubrir con sus armas principales. Cuanto más alto es un tanque, más grande, por regla general, es su espacio muerto. En general, el radio del espacio muerto del cañón de la torreta es de unas 20 yardas; de la ametralladora, unas 10 yardas (ver fig. 7). Para combatir objetivos en el espacio muerto, los tanques tienen ranuras a través de las cuales se pueden disparar pistolas y subfusiles. Al asaltar un tanque, los cazadores de tanques alemanes hacen todo lo posible por utilizar el espacio muerto. Intentan acercarse a un tanque desde la dirección opuesta a la de sus armas principales. Esto también es en el sentido contrario a su observación principal (ver fig. 8).
Fig 7.
Fig. 8
El cazador de tanques con el arma principal para la lucha cercana, la usa contra el tanque mientras que los otros cazadores de tanques lo apoyan con su fuego. Si se ve obstaculizado por este fuego, los otros cesan. Si los miembros de la tripulación del tanque, conscientes del asalto, abren la escotilla de la torreta para defenderse con granadas de mano, los cazadores del tanque aprovechan este momento para disparar contra la torreta abierta y herir a la tripulación. La doctrina alemana establece que las tripulaciones de los tanques parados o en llamas que no se rindan al salir serán destruidas en combate cuerpo a cuerpo. Si los tanques siguen intactos, los alemanes los inutilizan retirando los bloques de culata de los cañones, dañando los cañones y prendiendo fuego a los tanques de gasolina.
En los próximos números veremos las diferentes armas que usaban para atacar y destruir o inmovilizar a un carro enemigo. Descansen soldados...
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