Miles de hombres de todas partes del Imperio
defendían el limes romano, la frontera que separaba la civilización de la
barbarie, desde las arenas del desierto del Sahara y la península arábica a las
aguas del Danubio y del Rhin. Para lograr proteger las inmensas fronteras se
construyeron cientos de fuertes, torres y tramos de murallas que se adaptaban a
la geografía y al tipo de amenaza.
Seria
en la zona norte del Imperio donde se construirían las mayores obras defensivas,
especialmente en las húmedas y frías tierras de Britania. Tras varios intentos
de conquistar a los pueblos de Caledonia, actual Escocia, siendolas campañas de Agrícola las más exitosas, el emperador de origen hispano
Adriano decidió un cambio de estrategia…
Basquetteur. Wikicommons |
Su
idea era construir un muro con una doble función: defensiva frente a los
posibles ataques y fiscal como puesto aduanero. Este limes fortificado se extendía durante 117 km desde el golfo de
Solway, en el oeste, hasta el estuario del río Tyne en el este, con 14 fuertes
principales y 80 fortines que albergaban guarniciones en puntos clave de
vigilancia, así como un foso en su parte septentrional y un camino militar que
la recorría por su lado meridional. Este hito en la ingeniería militar fue
construido entre el 122-133, en un plazo record, con el paso de las décadas sufrió
numerosos cambios para adaptar sus defensas.
El
muro de Adriano desde su creación está rodeado de un aurea de misterio y
aventura que hizo que se fabricasen suvenir para que los soldados enviasen a sus
familias. En la actualidad fue la fuente de inspiración de numerosas novelas históricas
y de la saga de fantasía Canción de Hielo y Fuego, origen de la
serie televisiva Juego de Tronos.
Entre
los muromaniáticos, entre los que me
encuentro yo, destaca el amigo de BHM Sergio Geijo, creador de las webs www.viatorimperi.com y www.tuslibrosderoma.com,
que nos ofrece con este su primer un viaje por la historia de este Monumento Patrimonio de la
Unesco.
“El Muro de Adriano y los Auxilia”
está estructurado en cuatro capítulos
a través de los cuales podemos descubrir su historia, sus construcciones, la
vida de los soldados que la defendieron y los lugares que podemos visitar en
nuestros días. El primero se inicia
con su construcción en el año 122 d.C., y nos relata cómo fue transformándose hasta
el abandono de Britania por las legiones romanas a principios del siglo V d.C. El segundo capítulo está dedicado al
ejército romano en el Muro de Adriano formado, no por las conocidas legiones
romanas, sino por las unidades auxiliares, integradas por soldados procedentes
de todos los rincones del Imperio. En este apartado veremos quiénes eran, cómo
se organizaban estas unidades, cómo eran reclutadas y cuáles eran sus
actividades diarias en el Muro. El
tercer capítulo se centra en las construcciones que formaban el sistema
fronterizo del Muro de Adriano, la muralla propiamente dicha, las torres de
observación, los puestos de guardia o milecastles,
los fuertes auxiliares o los asentamientos civiles desarrollados junto a éstos.
El último capítulo es una guía de
viajes a través de la cual podemos descubrir cuáles son los lugares más
interesantes para visitar el Muro, tanto en la costa de Cumbria como en el
famoso recorrido del Camino del Muro de Adriano, considerado como la ruta
senderista preferida por el público británico.
Es
difícil encontrar en castellano un libro que trate en profundidad este tema,
por lo que se convierte en una obra imprescindible para los amantes del muro.
Yo ya tengo una guía de viaje para cuando pueda visitar el muro en el norte.
Ficha Técnica:
Autor: Sergio Geijo
Nº de páginas: 176 págs.
Editorial: CreateSpace Independent Publishing Platform
ISBN: 978-1544086989
“El muro de Adriano y los auxilia”
Francisco García Campa – Bellumartis Historia Militar
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