LA MAYOR OPERACIÓN DE RESCATE DE LA II GUERRA MUNDIAL. LA EVACUACIÓN DE PRUSIA ORIENTAL. I PARTE.

El Prinz Eugen, protagonista de esta historia junto con los restos de la Kriegsmarine.

En el último año de guerra, la Kriegsmarine y la marina mercante salvaron a más de dos millones de alemanes de la zona de Prusia por mar, hasta el día de hoy, la operación de rescate más grande y exitosa de la historia, vamos saber más de sus protagonistas, y de lo titánico de su esfuerzo.
En enero de 1943, la situación de la Wehrmacht es desigual en muchos frentes, pero la que parece que no va tan bien es en el mar, tanto que Hitler plantea desguazar las unidades pesadas de la Kriegsmarine debido a lo que el Führer considera un fracaso, su flota de superficie no parece estar haciendo nada por la victoria, e iba camino de repetir su función durante la Gran Guerra (aparte de que necesitaba sus enormes masas de acero para la construcción de nuevos tanques). Pero el Gran Almirante Dönitz, como nuevo comandante en jefe de la Kriegsmarine, impidió esta orden sin sentido y en su lugar, los barcos se agruparon en el Mar Báltico como una "Agrupación de entrenamiento".
En 1944, como fuerzas navales de entidad quedaban cuatro cruceros pesados (Prinz EugenAdmiral HipperAdmiral ScheerLützow) dos antiguos acorazados (Schleswig-HolsteinSchlesien), y cuatro cruceros ligeros (EmdenKölnLeipzig Nützig) que fueron destinados para apoyar a las tropas del Ejército a lo largo de la costa de Prusia Oriental, en la dura batalla defensiva que iban a tener que realizar contra los ejércitos soviéticos que avanzaban. 
Se estableció un plan denominado “Cascanueces”, un código de fuego de apoyo elaborado por el Primer Oficial de Artillería (E.A.0. en alemán) el capitán de corbeta Schmalenbach del Crucero Pesado "Prinz Eugen". No se puede considerar unas reglas exactamente de tipo naval, se trataba de disparar a objetivos invisibles tierra adentro. Rápidamente se pusieron a entrenar los artilleros de los buques mencionados, porque su presencia venía a paliar en 1944 lo que le faltaba al frente en todas partes desesperadamente; artillería pesada y de largo alcance. 
Los artilleros navales son artilleros de precisión por naturaleza: normalmente tienen que disparar a blancos igualmente veloces y tambaleantes que se mueven con rapidez y que se balancean. Sus nuevos destinos, hasta treinta kilómetros tierra adentro, son en su mayoría inmóviles, lo que hacía que las cosas fuesen "fáciles", pero raramente visibles, lo que dificultó las cosas. 
El método de tiro de capitán de corbeta Schmalenbach para esta situación era tan simple como efectivo: todo lo que se necesitaba era un buen mapa de la zona objetivo y un blanco auxiliar visible desde la orilla del barco (iglesia, faro, etc.). Una vez que se tenía, se podía calcular fácilmente la dirección y la distancia desde el barco hasta el destino. Debido a que esto tendría que ocurrir mucho tiempo -porque los barcos tenían que disparar mucho por razones de seguridad- también se destinó una “calculadora” de objetivos terrestres, una máquina que ayudaba a los artilleros a asegurar el blanco. Con estas asistencias, los cruceros pesados disparaban con tanta precisión durante unas pruebas en la primavera de 1944 que los observadores de la artillería del ejército se mostraban entusiastas.

Enero de 1945, Volkssturmes con Panzerfaust en una posición frente a la ciudad de Königsberg.

BUQUES COMO APOYO ARTILLERO A LA INFANTERÍA 

El primer despliegue de los grandes barcos como artillería flotante llegó antes de lo esperado: a finales de julio de 1944, cuando el Grupo Central del Ejército se derrumba bajo la embestida del Ejército Rojo, el 1er Frente Báltico (que corresponde a un Grupo del Ejército Alemán) avanzaba en la sección septentrional bajo la dirección del general Yeriómenko desde la zona este de Velikije Luki hasta la costa del Mar Báltico, justo al oeste de Riga, por lo tanto, el Grupo del Ejército Alemán del Norte estaba aislado de su conexión terrestre, literalmente rodeado. Pero un lado de su prisión era el mar, y ahí estaba la Marina; ella se encargaría del Ejército, pero no sólo eso, ya que cuando el 20 de agosto, el grupo Strachwitz  del 3er Ejército Panzer se dirigió a la costa para avanzar desde el oeste hacia Riga y restablecer el contacto con el Grupo del Ejército del Norte, el "Prinz Eugen" estaba listo en la Bahía de Riga.
Strachwitz y soldados delante de un vehículo de combate (Sd. Kfz. 205) antes de la gran ofensiva.
Un ejemplo de la importancia del apoyo lo podemos ver en la siguiente acción: durante los primeros momentos los operadores de radio del ejército que se mantenían en contacto con la vanguardia de los tanques de Strachwitz transmitieron la petición de si el "Prinz Eugen" podría destruir los fuertes despliegues rusos en Tukums y sus alrededores. Tukums, una pequeña ciudad en un valle 15 kilómetros tierra adentro, era un cruce de tráfico y una posición clave - los atacantes alemanes tenían que pasar, y los rusos lo sabían. Cuando empieza el ataque, los soviéticos no saben de dónde viene el fuego masivo de artillería, que los cubre con una fuerza devastadora. Incluso las primeras salvas - ocho obuses de 20,3 cm cada uno al mismo tiempo en un espacio muy pequeño - estaban totalmente alineadas. Desesperados, pero sin éxito, los soviéticos llegaron a disparan a los aviones que volaban sobre la zona del objetivo, en la creencia de que los pequeño Arados 196 pudieran llevar tantas bombas.
Sin ser molestado, pero custodiado por un enjambre de destructores y torpederos, el "Prinz Eugen" navega de un lado a otro de la costa y lanza salvas por los cañones hasta que los tanques alemanes llegan a las afueras de Tukums y piden el cese del fuego. A medida que la resistencia rusa se endureció un poco más tarde, se lanzó otro rodillo de fuego justo delante de la vanguardia de los tanques, y luego se disparó a la artillería rusa que estaba situada en una altura que dominaba el territorio. Como el "Prinz Eugen" no era atacado ni en el agua ni desde el aire, el Vicealmirante Thiele, comandante del "Grupo de Batalla Thiele", pudo liberar a dos destructores de su función de protección y se acercan más a tierra y apoyan con sus cañones de 15 cm (para las condiciones de la infantería también son armas de grueso calibre) el avance de las unidades que luchan desde Riga contra los tanques de Strachwitz.
Hacia la noche, el Grupo Strachwitz agradece al Grupo de Combate de Thiele por su excelente apoyo; el importantísimo avance de Tukums ha logrado restablecer el enlace terrestre con el Grupo del Ejército del Norte, aunque sólo sea una conexión estrecha, a través de la cual 29 divisiones y varias brigadas con todo su armamento y equipo pesado y más de 100.000 vehículos pueden desplazarse en las próximas semanas, una masa de personas y material que difícilmente podría haber sido transportado por mar.

OPERACIONES DE EVACUACIÓN EN EL BÁLTICO 

La primera gran operación de evacuación de la Kriegsmarine comienza sin embargo más al sur, más o menos al mismo tiempo: un avance masivo de Rusia también amenaza Memel, el puerto báltico más septentrional de Alemania, a finales de julio. El primero en reconocer esto con toda claridad es el jefe de la 24ª flotilla submarina estacionada en Memel, el capitán de fragata Merten. Debido a que no había mensajes claros desde el frente, envió sin avisar a algunos oficiales de submarinos con equipos de radio a investigar, cuyos mensajes pronto le dejaron en claro la gravedad de la situación, así que Merten actuó. No sólo organizó el traslado de su escuela de submarinos, sino que también, con el apoyo del Gran Almirante Dönitz, evacuó a mujeres, niños y ancianos de la ciudad y sus alrededores contra la decisión del Gauleiter Koch. Alrededor de 50.000 alemanes de la región de Memel son puestos a salvo gracias a los buques proporcionados por los departamento de transporte marítimo de Pillau, Danzig y Gotenhafen. 
Refugiados huyendo de Prusia Oriental
En el próximo artículo, continúan las operaciones de evacuación de la Kriegsmarine  en el Mar Báltico.
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