El Galeón San Juán se adentra en la ría, al fondo la hoguera avisando del ataque inglés. |
Antonio Navarro Menchón |
Los
ingleses decidieron vengarse de la desafortunada Grande y Felicísima Armada con un contraataque a las costas
gallegas y portuguesas. La conocida como la Contraarmada
formada por 23.375 hombres y 120 barcos capitaneados por el almirante Francis Drake y por el
general John Norris en tierra.
Los
ingleses confiaban en el factor sorpresa pero un vigilante en Estaca de Bares
les estropeo la fiesta. Su orden era encender un fuego por cada navío enemigo
pero al ver la inmensa flota decidió prender una gran hoguera y correr a lomos
de su caballo hacia Coruña. Advirtió al capitán Juan Sánchez Cotrofe de la
inmensa flota que se acercaba: “…son por
lo menos ochenta, o cien velas, o quizá más…tal vez ciento veinte”. Tras las
primeras dudas el capitán se lo comunicó a
José Pacheco, Marques de Cerralbo y gobernador de la plaza fuerte...
La Coruña en 1589. Relieve estatua Maria Pita |
Por
suerte para los defensores la ciudad tenía una guarnición de 150 arcabuceros
bajo las órdenes de Álvaro Troncoso además de 500 soldados viejos de Infantería
de Marina. Junto a estos profesionales, 340 piqueros 220 arcabuceros
procedentes de las milicias locales. En total 1200 hombres guarnecidos tras las
murallas coruñesas se enfrentaban a la mayor flota inglesas que nuestras costas
habían visto.
El
4 de mayo se confirmaron la peor de las noticias, el objetivo de la armada de
Drake era la ciudad de Coruña. Una gran hoguera se enciende en la torre de Hércules
como señal de alarma para movilizar a las milicias locales.
Los barcos de guerra, veteranos de la
Grande y Felicísima Armada, salen del puerto para crear un perímetro defensivo que
trazaba un arco protector sobre la gran
playa de la Marina. Los capitanes y sus tripulaciones, pese a la inferioridad numérica
y a la escasez de munición, salen a la mar para cumplir su misión a bordo de
los siguientes navíos: el Galeón San Juan (50 cañones) de la Escuadra de Portugal,
Nao San Bartolomé (20 cañones) de la Flota de Andalucía, y las galeras de
Portugal Diana y Princesa (5 cañones).
Retrato de John Norreis. Hacia 1600 |
Al medio día la flota inglesa se
interna en la ría y se detiene fuera del alcance de los cañones del castillo de San Antón. Al poco unos
8.000 infantes, bajo las órdenes de Norreys, descienden a sus lanchas para
desembarcar en las arenas de Santa María de Oza para atacar la Ciudad Baja.
Para hacer frente a este contingente el capitán Álvaro de Troncoso y Ulloa disponía
de 150 de expertos arcabuceros que venderían caras las arenas de Oza. Tras
numerosas bajas, los ingleses se dan cuenta del escaso número de los tiradores
españoles y deciden rodearlos, por lo que Troncoso se retira hacia el pequeño fuerte de Malvecín, próximo a la muralla de las Pescaderías.
El
primer ataque había sido detenido por los arcabuceros, todo un triunfo moral
para los coruñeses, y para las siete compañías de los Tercios Viejos que
estaban descansando en la ciudad que ahora debían proteger. Con unos excelentes
capitanes como Julián de Luna y Diego de Bazán, una gran disciplina y un deseo
de venganza contra los ingleses venderían muy caras las murallas de Coruña.
Los invasores tras lograr capturar la artillería
del galeón San Bernardo, que estaba
siendo reparado en el arenal, pensaron que la batalla estaba ya ganada. En la
noche desembarcaron sus cañones que al alba comenzarían a debilitar la muralla de Pescaderías. Pero su sorpresa
fue grande cuando comenzaron a recibir un nutrido fuego de artillería desde los
castillos de San Antón y de los buques San
Juan y San Bartolomé. El duelo
entre el galeón y las baterías inglesas fue épico hasta tal punto que los
ingleses trataron de tomarlo al asalto sin éxito. Tras duros combates y debido
al estado del San Juan se decidió
hacerlo explotar, eso sí cuando llegasen la sección de abordaje inglesa. El
galeón en su último suspiro se llevó por delante la vida de 14 ingleses en su
gran explosión. Mientras las galeras tras una escasa participación en el
combate reciben órdenes de tratar de escapar hacia Ferrol y el San Bartolomé fue hundido para impedir
su captura.
La Invencible Inglesa en la ria. Relieve escultura M. Pita |
La pérdida de los navíos hizo un hueco
en el sistema defensivo que permitió acercarse fácilmente a los ingleses a los muros de la Pescadería. Los infantes
españoles se encontraban en las murallas, por lo que no pudieron detener a los
1.500 invasores que a bordo de lanchones lograron desembarcar tras la parroquia
de San Jorge a los pies de la Ciudad Alta.
Los defensores al verse rodeados decidieron refugiarse en el castillo de San Martín mientras que
otros a sangre y fuego se internaron en la Ciudad
Alta. La trágica noche del 5 de mayo cubrió de sangre las calles de la Ciudad Baja, los ingleses llenos de ira
por sus numerosas bajas se vengaron con los civiles, especialmente con las
mujeres, unos 400 coruñeses fallecieron en esta “noche triste”.
Al día siguiente, sábado 6 de mayo, los
vecinos de Betanzos, San Saturnino y los alrededores se dirigieron armados de
todo aquello que pudiese matar a los invasores. Unos 1400 hombres bajo las
órdenes del veterano capitán de Flandes, Juan de Varela, sumándose por la tarde
refuerzos de Santiago de Compostela, dos compañías de asturianos bisoños y
otras tres compañías del señor de Cayón, siendo ahora unos 2400 españoles los
que impedirían nuevos desembarcos y hostigarían al enemigo desde el monte de
Arcas.
Los sitiados vieron el movimiento de
los refuerzos lo que levantó la moral de civiles y soldados. Durante varios
días los ingleses atacaron las murallas mientras que de noche seguían cavando
una mina bajo las murallas. En la Ciudad
Alta todos aportaban su granito de arena, las mujeres y niños llevaban
agua, comida e incluso municiones a los soldados que defendían las murallas, o
portaban piedras y arena para rellenar las brechas en las defensas.
El día 12 los ingleses hacen explotar
una de las minas pero fue un fracaso, ya que se quedó corta. Desde las ruinas
del convento de Santo Domingo disparan día y noche contra las murallas hasta
que la mañana del día 14 abren brecha. Pero los hombres del capitán Pedro Ponce
y del alférez Antonio Herrera frena la entrada del torrente invasor por la
herida de las murallas. A las seis de la tarde explotó otra mina que alcanzó
las murallas, aunque la suerte no acompañó al invasor o fue la ayuda de la
virgen del Rosario, sepultando a 300 de la vanguardia inglesa. La brecha esta
vez fue cubierta por los hombres del capitán Troncoso.
"Maria Pita" de Fernández Cersa. |
Patrimonio Artístico Municipal |
Pero el orgulloso Norreys ordenó un
gran ataque a diez compañías de sus mejores hombres, a los que acompañó en
primera línea de combate. Lograron penetrar en una brecha al grito de “YA SON
NUESTROS” cuando el mismísimo diablo vestido de mujer apareció en la muralla
arrancando de la mano el estandarte al oficial ingles que lideraba la
penetración, tras clavarle una pica en el vientre.
La heroína gritó “QUIEN TENGA HONRA QUE ME SIGA” un llamamiento al pueblo de Coruña que mano a mano
con el ejército defendió su ciudad del ataque inglés. Su nombre era María
Mayor Fernández de Cámara y Pita (1565 – 1643). Al igual que el resto de
mujeres de la ciudad sabiendo de lo que eran capaces esos herejes, muchas de
ellas habían logrado sobrevivir a la noche del 5, decidieron morir luchando.
Y es que las mugeres e hijos acudían a las partes mas peligrosas con mucho
ánimo con muchas piedras con las cuales tiraban a los enemigos con que les
descalabraban e azian mucha ofensa…
Los ingleses se retiraron a lamerse
sus heridas tras enfrentarse a la mejor infantería del mundo y al pueblo de
Coruña. Tras saquear durante varios días la ciudad vieja y los alrededores
decidieron el día 19 de mayo retirarse poniendo rumbo a Lisboa. Tras de sí
dejaron 1300 muertos y varios buques y barcazas de desembarco, además tuvieron
que llevar consigo a cientos de heridos que dio lugar a una serie de epidemias
en los navíos. La ciudad sufrió la perdida de unas 1000 personas, la mayoría
civiles, pero demostró a los ingleses el precio de pisar suelo español.
"María Pita como Álfrez Mayor" de F. Gutierrez |
Museo Militar de la Coruña |
Este texto y
varios más del blog Bellumartis Historia Militar formarán parte de la exposición
del pintor Antonio Navarro Menchón en el Museo Militar de la Coruña, del 18
de octubre al 20 de diciembre.
Para saber más puedes comprar estos libros así ayudas a BHM
“La
Invencible Inglesa de Drake en Coruña, 1589” Francisco García Campa –
Bellumartis Historia Militar
Enhorabuena por el trabajo realizado. Muy buen artículo!
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado y te invito a compartirlo
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